Vistas de página en total

domingo, 12 de agosto de 2012


Si no te dibujas sentimentalmente no existe nada,
No existe espejo donde mirarte para intuir de qué estás hecho,
No existe un margen de adecuación a tus lágrimas,
Ni una fortaleza que te indique que de dichos ríos debes subir…
para  experimentarte,
para acelerar tus latidos en alguien más.
Si no existes en lágrimas tu existencia se vuelca hacia adentro,
y no tiene expectativa, ni forma de sueño vestido de primavera,
tiene la boca del invierno, suspirando frialdad
diciéndole cuentos a la nada mientras sólo quieres subir,
mientras sólo quieres soñar…
Por eso en nuestros encuentros sólo te quiero vestida de ti,
Aunque ocasionalmente me brindes tu desnudez
Y pueda experimentarte más adentro,
Por eso sólo quiero de ti, palabras a través de las cuales te sienta desnuda,
Borrando cualquier sustancia externa que no forme parte de ti.
Del resto me conformo,
por la consecuencia natural de tenerte entera,
sin mirar a algún lugar,
sin prisa para sentirme en un hogar
solo desnudo en tu desnudez…

sábado, 4 de agosto de 2012


Cabello, de balbuceo de silencio y de extensión de melodía
Sustancia oculta con lenguaje propio,
con soberanía de seda y cuerpo de carmín,
sin desatar las hebras que se unen a tu propio fin
ni a tu contraste de crecimiento perpetuo en primavera…
Habitas la fórmula que renace en mí,
contándole a los segundos la lejanía del origen en ti,
forzando al tiempo a atraer los seres a tu dulce esfera…
Atardecer abasteciéndome en tu esencia mi ser espera,
sin minutos ni barreras que asemejen a un fin…
Y hoy que te tengo en perspectiva,
desde la fuerza desnuda de tu mirar,
me permito considerar la acechanza a tus ojos como un
motivo directo a la invitación de contemplar,
al azul, a la forma,
al acorde desorientado inherente en ti,
y a la melodía de las sensaciones que todas esas noches colocaste en mí.
impulsando a la madrugada a lucir iluminada,
derramando en palabras mis sueños en veda.
Forzosa contradicción entre un recuerdo y un sentir,
entre un latido y su proseguir
equilibrando en un solo ser a su esfera.